El consumo de contenidos en Internet

Cada vez que ha surgido un nuevo medio de comunicación, sobre todo durante el siglo XX, se ha pronosticado el final de su predecesor. En la mayor parte de los casos no ha sido así, ya que cada uno se ha terminado adaptando a ciertas necesidades de la audiencia. Con Internet también se ha apostado por la muerte de la prensa de papel, del cine, de la radio y de la televisión. Pero hasta ahora eso no ha sucedido, y tampoco parece que ocurra inminentemente. Entonces, ¿cuál es el papel que tiene Internet en cuanto al consumo de contenidos?

Nuevo diseño del servicio "A la carta" de RTVE.es

En el caso de la producción audiovisual, el espectador demanda, cada vez más, la visualización de los contenidos a cualquier hora, sin necesidad de adaptarse a una programación previamente definida. Algunas empresas de televisión están empezando a comprender esto, y acceden a compartir sus contenidos, tras su emisión, mediante su página web. Aunque en España las televisiones privadas han hecho grandes avances, Televisión Española ha ido más allá y pretende poner a disposición del público gran parte del archivo de producción propia, a través de RTVE a la carta. Este servicio, que ya se ofrecía desde hace tiempo, ha adoptado un nuevo diseño y un mayor número de programas, teniendo muchos de ellos un gran valor histórico.

Cuando se trata de ficción elaborada en otro lugar, como las películas y series de televisión norteamericanas, también espera que su consumo sea lo más próximo posible a su emisión nativa. Las largas negociaciones por la compra de derechos de emisión, por su traducción y doblaje, hacen que los usuarios opten por una vía más rápida. Gracias a la colaboración desinteresada de algunos usuarios, hay series que, a las pocas horas de emitir un capítulo, ya pueden ser vistas en la Red mediante subtítulos. Una de las páginas traductoras más antiguas e importantes en español es Argenteam. Una de las series que más éxito ha tenido en la última década, Perdidos, ha sufrido en España las consecuencias de esta falta de paciencia. Sus emisiones en televisión no han tenido el seguimiento esperado, por lo que fue emitida por tres cadenas diferentes: La 1, La 2, y Cuatro. Esta última alcanzó un acuerdo con ABC, la cadena de la serie en Estados Unidos, con el que intentó adaptarse al nuevo escenario con el último capítulo, al programarlo casi al mismo tiempo que ellos.

La instantaneidad también se traslada al periodismo multimedia. La demanda de información en Internet requiere que cualquier hecho noticioso relevante sea publicado inmediatamente después de que ocurra, e incluso durante su desarrollo cuando se trata de un acto ya previsto. Esto exige una constante actualización que dificulta e incluso impide la aportación de un cierto rigor periodístico.

En muchas ocasiones, el usuario solamente accede a la información cuando le llega a través de las redes sociales. Los contactos personales de cada individuo se han convertido, de este modo, en difusores de noticias, del mismo modo que el modelo publicitario del marketing viral. Por lo tanto, ya no hay un acercamiento hacia la noticia, sino al revés: es la información la que llega al público.

La industria informativa digital debe buscar, en este entorno de superficialidad y falta de motivación, un lugar que cubrir con un mayor nivel de profundidad. Aunque haya muchas personas que buscan inmediatez, también hay quienes están dispuestos a pagar por algo más, siempre y cuando sea de mayor calidad. Por ello se están desarrollando diferentes estrategias comerciales con los nuevos dispositivos portátiles. Este debe ser el camino por el que investigar nuevas formas de financiación en Internet.